Esto ha generado un problema entre ambas entidades, que ahora deberán resolver una disputa para dictaminar quién se queda con los derechos del nombre.
Legalmente en Netflix tienen defensa para hacer una serie sobre la Fuerza Espacial gracias a la primera enmienda de la constitución de los Estados Unidos que defiende la libertad de expresión. Además la compañía ha estado más rápida asegurando los derechos de este nombre en sitios como México y Europa, lo que le da ventaja sobre el propio gobierno.
Los derechos sobre el registro de una licencia operan de forma distinta en cada país. Estados Unidos ofrece la propiedad de una patente a la primera entidad que le de uso comercial, no a quien la registre primero, algo que sí sucede en otros países. Sea como sea, Netflix registró dicha licencia en enero de 2019, por tanto ganan en ambos casos
Netflix tiene protección en diversos frentes para quedarse con el título y hacer que las mismísimas Fuerzas Armadas de Estados Unidos tengan que buscarse otro nombre para su división espacial.
A pesar de todo esto de momento no hay litigio en marcha por este asunto y un representante de la Fuerza Aérea le decía a The Hollywood Reporter “les deseamos a Netflix y los productores de la serie lo mejor en su representación creativa de la nueva división del ejército de nuestro país“.
Ahora solo podemos esperar a que la serie renueve por una segunda temporada y que los guionistas conviertan todo este asunto en una suerte de metabroma dentro de la propia ficción. Seguro que el equipo del general Mark R. Naird pasará un rato bastante entretenido si descubren que su división entra en un conflicto legal con una nueva serie de televisión.