Eric Heisserer, guionista de Arrival y Bird Box, es el creador de la serie. La primera temporada de ocho episodios adapta y entrelaza de manera magistral algunas de las historias que Bardugo ha contado en cinco de sus libros.
Alina Starkov no espera mucho de la vida. Se quedó huérfana después de la guerra y lo único que tiene en el mundo es a su amigo Mal. A raíz de un ataque que recibe Mal al entrar en La Sombra, una oscuridad antinatural repleta de monstruos que ha aislado el país, Alina revela un poder latente que ni ella misma sabía que tenía. Tras ese episodio, Alina es conducida a la fuerza hasta la corte real para ser entrenada como un miembro de los Grisha, un grupo de magos de élite comandado por un individuo misterioso que se hace llamar El Oscuro. Mientras tanto, Kaz Brekker (Freddy Carter), líder de los Cuervos, se entera de un lucrativo trabajo de ladrón que requiere que cruce La Sombra y recluta a sus cómplices de mayor confianza: el francotirador Jesper (Kit Young) y la espía Inej (Amita Suman) para acompañarlo. Una tercera línea sigue a la grisha Nina Zenik (Danielle Galligan) que es capturada por un soldado de élite Fjerdan llamado Matthias Helvar (Calahan Skogman).
Debido a que los personajes de Shadow and Bone están tan esparcidos por todo el mundo, Heisserer se enfrentó a un gran desafío para contar una historia completa y coherente. Llevar a los Cuervos a Ravka para cruzar La Sombra y establecer un vínculo entre Nina y el ejército Grisha del general Kirigan son formas inteligentes de conectar los hilos dispares, aunque requiere algunos cambios en ciertos aspectos de los libros con los que los fanáticos pueden chocar. Aún así, durante gran parte de la narrativa, los personajes se extienden por todas partes, lo que obliga a que se salte en términos de escenario y tono. Mientras Alina sigue el ahora arquetípico viaje de una heroína juvenil que debe salvar el mundo, los Cuervos son delincuentes astutos que llevarán a cabo múltiples atracos. Luego están Nina y Matthias, que se enfrentan a los prejuicios de los Fjerdans contra los Grisha. Aunque a veces puede parecer un poco inconexa, la serie usa de forma inteligente el mundo para unificar la trama hasta convertirla en diferentes perspectivas dentro de esa realidad.
Lo que también ayuda a mantener a los espectadores interesados son los personajes fuertes y las actuaciones del elenco principal. Li tiene quizás el papel más importante como Alina, y lleva bastante bien el rol de heroína adolescente. Aún así, Alina a veces se ve ensombrecida por los personajes que la rodean, aunque Li se las arregla para mantenerla firme. Barnes como Kirigan es magnético y fascinante, interpretando al personaje torturado muy bien, evocando simpatía y miedo en todos los momentos correctos. Renaux también es encantador como Mal, lo que aporta un equilibrio a la interpretación de Alina, y le da a la relación de los personajes una cualidad tierna. En cuanto a los Cuervos y a la pareja Nina y Matthias, aunque se les da un poco menos para trabajar, son igual de atractivos, con Young destacando en su interpretación de Jesper. Aunque Inej y Kaz son más serios, junto a Jesper tienen muchos momentos divertidos y su amistad es lo más destacado de la temporada. Por último, Galligan y Skogman tienen mucha química, ya que los antagonistas Nina y Matthias y sus escenas, aunque la mayoría del tiempo están alejadas del resto de la acción, son un deleite de ver mientras los personajes se involucran en muchos combates verbales.
Quizás el aspecto más fuerte de Shadow and Bone es el mundo de fantasía que Bardugo, Heisserer y el resto del equipo han creado para que estos personajes y sus dramas se desarrollen. Parte de esto proviene de la base establecida por la escritora en sus novelas: la mitología de los Grisha y La Sombra, así como la política de Ravka, Fjerda y Kerch están bien establecidos en los libros. Pero la forma en que el mundo cobra vida, desde la textura de los poderes de la Invocadora del Sol hasta el entorno arenoso de Ketterdam, ayuda a la audiencia a sumirse por completo en la obra. Heisserer se ha ocupado de cada detalle, incluso de los intrincados diseños de las keftas de los Grisha, lo que da aspecto y una sensación distintivos que es exclusiva del Grishaverse. Aunque no está claro cuál era el presupuesto de Shadow and Bone, es seguro que lo han usado para asegurarse de que los diversos poderes grisha y el mundo se vean reales y tangibles.
La serie es un drama de fantasía emocionante, que mezcla algunos momentos ligeros en su tejido para crear una historia entretenida. Debido a que la primera temporada es una mezcla de narraciones nuevas y conocidas, hay algo para los fanáticos de la saga literaria y los recién llegados al Grishaverse por igual; incluso aquellos que hayan leído los libros encontrarán mucho que descubrir en la serie de Heisserer. De hecho, esta puede incluso profundizar el aprecio de los fanáticos por las novelas de Bardugo. Y con el final de la temporada 1, allanando el camino para muchas más aventuras, este es solo el comienzo de lo que podría ser otro éxito de fantasía para Netflix. Dados los personajes encantadores, los actores convincentes y el mundo bien elaborado, vale la pena ver Shadow and Bone.