"Escribía en esta versión de Batman v Superman sobre 2001 o 2002 cuando Colin Farrell iba a ser Batman y Jude Law, Superman con Wolfgang Petersen como director. La estábamos preparando e iba a ser la cosa más oscura que hayan visto nunca. Empezaba con el funeral de Alfred y Bruce se enamoraba y renunciaba a ser Batman, el Joker mataba a su mujer y entonces descubres que todo era mentira. Que esa relación la había construido el Joker para destrozar a Bruce. Había un momento en el que estas historias podrían juntarse en un guion pero no encajaban en el universo. De alguna manera, las expectaciones -bien de la audiencia, corporativas o de dirección- no encajaban del todo como las imaginamos cuando las pusimos sobre el papel".
Esta idea habría destripado por completo el material original, lo que no quita que podría haber sido una de las películas de superhéroes más duras del cine y que habría roto algunos esquemas que quizás no se hayan roto hasta el estreno de Joker.